29.6.06

martes, 29.06.1806 – la cuestión de los tesoros reales

Desde la villa de Luján, se recibió la respuesta de Sobremonte (el virrey en fuga) sobre el tema de los caudales reclamados por Beresford. Pese a que en su opinión no correspondía entregarlos (por haber sido retirados antes de la entrada del invasor) transige en devolverlos, en atención al buen trato recibido por la población, aunque con la promesa de someter este desacuerdo a consideración de las dos Cortes. Antes de partir rumbo a Córdoba, Sobremonte da órdenes al coronel Francisco Rodrigo, responsable de conducir el tesoro, que hiciera “entrega de los caudales del Rey y de la Compañía de Filipinas a disposición de los Señores Generales Ingleses que han tomado posesión de Buenos Aires”.

Beresford encarga al capitán Thomas Arbuthnot, junto a seis dragones y veinte infantes del regimiento 71, a que junto a varios cabildantes, se dirijan a Luján para disponer de los caudales y traerlos a Buenos Aires.

Parten en la noche lluviosa y llegan a Luján en la madrugada del día siguiente.